sábado, 18 de julio de 2009

GRAN DILEMA...

Ya es tarde, la noche esta cayendo con su luna que se desploma detrás de aquella colina,como toda la realidad entre mis cansados párpados, me encuentro demasiado exhausto para continuar pero el dilema que me envuelve no deja que abandone este lugar, esta silla, ese cigarrillo consumiendose, aquella música francesa de aguas turbulentas o aquel buho disecado que me mira con sus ojos vacíos pero con historia, una mirada detenida en otros tiempos,allí donde sus alas aún disponian del movimiento necesario para cazar roedores extraviados de su lugar de origen.Llevo desde el atardecer consumiendome el cerebro preguntandome que hacer.¿La mato?¿no la mato?¿dejo que escape a algún paisaje lejano y placentero? Pero todo ha sido dispuesto para cometer el crimen perfecto,el asesinato ideal donde no haya pruebas que incriminen a nadie y la policía tendría que resolver un rompecabezas imposible, además,ella no tiene ya cabida en esta historia,y debe ser así,aunque...¿Debo matarla? Tal vez un simple secuestro...Quizás tan solo valdría encerrarla en algún pozo abandonado a su suerte sin oxígeno y para siempre.Pienso, me detengo y vuelvo a pensar pero no ya desde mi conciencia,sino desde la de ella, esa mujer mataría a cualquiera por diferentes razones y causas,desde su propia piel ella lo haría ,asi que lo mejor sera no cambiar la historia tal y como se ha ido organizando y matarla pese a que la pena me inunde al reconocer que ha sido una piedra preciosa en mis argumentos, en mi vida, en los momentos en los que dejaba de ser yo para ser ella,sin su sonrisa esto nunca hubiera sido igual. Lo voy hacer, ya esta todo decidido,voy hacerla desaparecer como una hoja de papel se transforma en ceniza y la ceniza en un fenix indescriptible,jamás será encontrada, el crimen ha sido estudiado minuciosamente,pero ¿cuándo?¿dónde?¿con qué?¿debería ser en su casa? No, en su humilde cubículo no, la policía sabría que nada fue forzado,la probabilidad que conociese la cara de su asesino,que la apreciaba,era muy alta, y muchos caminos creados serian eliminados, no debe haber ninguna pista, evidencias que resuelvan cual es la tez de su verdugo con esa facilidad.Entonces ¿en un parque? con un cielo escondido entre camas de algodones y una espesa niebla que cubriera todo lo posible la visión nocturna, a lo mejor rodeados de patos y cierto cisne que añadiera unos tintes de ambiente mas romántico, un deseo por concluir, un banco con vistas a un horizonte infinito y un final ensordecedor.
El sol me esta de nuevo obsequiando con sus dulces rayos esclarecedores pero estoy demasiado cansado para continuar, sé que algún día la mataré, que a todo y a todos nos llega nuestro final y que esto también lo tendrá, que el crimen perfecto no existe pero existirá, que yo no existiré y que ella aunque permanecerá despues de mi ausencia ya estará muerta,asi que voy a dormir y cuando despierte seguiré escribiendo mi novela...

1 comentario:

  1. Lo que se mata no es sino una parte de nosotros mismos. Por eso dios dolor, no hace falta dañar a otros, para los que eligen aniquilar la huella que alguien dejó muy adentro.

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